martes, 9 de junio de 2015

Permítete hacer lo que te gusta

El olor a café por las mañanas me recuerda a mi infancia, ese suave y delicado aroma que recorre cada rincón de la casa. No me gusta el café, de hecho, detesto su sabor pero su olor me vuelve loca.

A veces, aunque en mi casa no se toma café, preparo una pequeña cafetera, simplemente para saborear el aroma del mismo. Cierro los ojos y me traslado a mi hogar maternal, a fines de semana en familia, a desayunos felices y a días de diario, de rutina de leche con cacao y café. La mayoría de personas pensarán que esto es una pérdida de tiempo y que es una tontería, pero a mi me gusta, y lo hago.


Pasamos tantas horas en nuestros trabajos, o estudiando cosas que realmente no nos importan que nuestra vida se acaba resintiendo. Ansiedad, estrés, depresión ¿te suena? La sociedad nos ha hecho interiorizar que debemos estudiar lo que tiene salida, que hemos de trabajar para ganar dinero, consumir y que nuestros gustos deben ser útiles y tener valor comercial.

Nuestro tiempo libre lo invertimos en ir de tiendas, en ver la televisión, en compartir nuestra vida por redes sociales o en ver las de otras personas que ni siquiera nos importan. Nos están robando la vida, sí, nos están arrebatando los momentos de placer real, de desconexión, de paz y armonía.

¿Cuánto tiempo hace que no realizas eso que tanto te gusta?, y la pregunta importante es: ¿realmente sabes lo que te gusta o simplemente aceptas lo que ha de gustarte?

Soraya R. Oronoz

No hay comentarios:

Publicar un comentario