domingo, 17 de noviembre de 2019

Actividad la casa de los reyes: investigando para qué sirve un Sitio Real

El pasado sábado 16 de noviembre, desarrollamos la actividad "la casa de los reyes: investigando para qué sirve un Sitio Real, en el marco de las actividades realizadas en la Semana de la Ciencia en el campus de Aranjuez de la Universidad Rey Juan Carlos.

Dicha actividad tuvo como objetivo principal transmitir a niños, niñas y a sus familiares el valor del respeto por el patrimonio y por el entorno natural.

Niños y niñas de entre 4 y 12 años se adentraron en el mundo de la investigación, y trabajaron de modo cooperativo en una gymkhana en la que fueron averiguando poco a poco algunas de las tareas que se desarrollaban en los Sitios Reales en época de Felipe II.

En ocasiones, a los profesores se les olvida, que los alumnos solo aprenden aquello que les emociona, que les motiva y que conecta con su realidad y con sus intereses. De poco o nada sirve hacer que los pequeños y/o pequeñas memoricen lecciones si no aman lo que están aprendiendo.

Está claro que hay aspectos que han de ser estudiados y memorizados, sería absurdo indicar lo contrario, pues gracias a ello se permite la interiorización de nuevos conocimientos y aprendizajes significativos, aunque siempre sería positivo y muy aconsejable recordar que el ser humano retiene mejor aquello que vive, que siente y que experimenta.

En realidad, el proceso de aprendizaje-enseñanza, viene dado de modo natural; pues el humano es un ser curioso por naturaleza. Los maestros y maestras, sobre todo en las primeras edades, tendrían que pararse a pensar, que su principal tarea en el mundo educativo consiste precisamente no en enseñar conceptos vacíos, sino en lograr que los educandos amen el conocimiento, lo demás, vendrá después si esta compleja tarea se logra.

Al igual que no se puede obligar a amar, no se puede obligar a aprender; ambas acciones han de nacer de la voluntad del sujeto. El educador, en cualquier etapa del sistema educativo, ha de proporcionar las herramientas adecuadas para que sea el propio individuo el que desee aprender. Consistiría no en obligar a beber agua a los alumnos y alumnas, sin que lleguen a tener sed, sino más bien en tener el vaso preparado para cuando ellos mismos sientan la necesidad de beber.

viernes, 1 de noviembre de 2019

Cuento Eloísa y el Palacio Real de Aranjuez

Un recurso para trabajar la Educación en Valores a través del Patrimonio y la Literatura

Son muchos los docentes que hablan de "Educar en Valores", pero muy pocos se plantean lo que ello significa en realidad. En este artículo se muestra un ejemplo audiovisual de un cuento de elaboración propia mediante el que se puede trabajar la Educación en Valores a través del Patrimonio y de la Literatura.

La relatividad moral es una realidad impuesta en cuanto a los temas transversales a tratar en el aula. Los educadores deberían plantearse la necesidad imperiosa de demandar un documento en el que se recojan los contenidos mínimos en cuanto a la formación moral de los discentes en el aula.

No es el objetivo de este artículo entrar a definir la compleja realidad de la Educación en Valores, sino el de proponer un ejemplo útil y práctico, mediante el cual se puede ligar la Literatura y el Patrimonio, para trabajar determinados aspectos de la formación moral, que quedan recogidos como temas transversales de modo laxo en la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación (LOE) y no modificados por la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre para la mejora de la Calidad Educativa (LOMCE).

Los temas transversales en Educación Infantil

Según la LOMCE, algunos de los temas transversales que se deben tratar en la Escuela se vinculan a la libertad personal, la responsabilidad, la solidaridad, la tolerancia, el respeto, la justicia e igualdad, el respeto a los seres vivos y al medio ambiente y el desarrollo sostenible entre otros. El Patrimonio Natural y Cultural, y la Literatura pueden convertirse en excepcionales aliados para abordar la denominada Educación en Valores. 

El cuento Eloísa y el Palacio Real de Aranjuez que se puede ver a continuación, permite trabajar diversas áreas del currículo del Segundo Ciclo de Educación Infantil entre las que se destacan el Conocimiento del Entorno, en especial el Bloque I: Medio físico, el bloque II: Acercamiento a la naturaleza; y del Bloque 3: Cultura y vida en sociedad. De igual modo constituye un recurso didáctico para introducir contenidos transversales importantes como el respeto por el entorno y por normas de regulación de la convivencia social, que permitan el correcto desenvolvimiento del sujeto en la sociedad.

Unir la Literatura y el patrimonio sin lugar a dudas parece una ideal forma de transmitir algunos de los Valores que se recogen como contenidos transversales en el Currículo Educativo de Infantil ¿Quieres saber cómo? A continuación puedes ver un vídeo con el cuento "Eloísa y el Palacio Real de Aranjuez" que escribí para el proyecto "Cuentos para crecer: Educación en Valores a través de la Literatura" y que proyectamos gracias a la ayuda de Mateo Rochette, de la Unidad de Contenidos Académicos de la Universidad Rey Juan Carlos en la Noche de los Investigadores para los más pequeños.